Que André Gomes es un futbolista que no termina de convencer a Ernesto Valverde es algo que salta a la vista. El portugués fue una petición expresa de Luis Enrique para la pasada temporada, ya que el asturiano demostró tenerle una fe infinita. Hasta de lateral derecho llegó a jugar el futbolista, aunque sin llegar a demostrar en ningún momento las razones por las que el Barcelona decidió pagar por su fichaje 35 millones de euros más bonus al Valencia. De ahí que tras el cambio de entrenador esté desapareciendo de los 'onces' del equipo...

El partido de Supercopa marcó un antes y un después para André Gomes

Los datos hasta el momento son demoledores para el compatriota de Cristiano Ronaldo: de ocho partidos oficiales solo ha participado en tres de ellos. En total ha disputado 92 minutos de juego sin tener ninguna influencia en el juego del equipo; y para colmo en el último duelo de Liga ante el Eibar ni siquiera se sentó en el banquilo a pesar de estar en perfectas condiciones físicas. De hecho, Valverde solo ha apostado realmente por él en un partido: el de vuelta de la Supercopa de España en el Santiago Bernabéu.

Esa noche André Gomes fue titular y estuvo 72 minutos sobre el campo. Pero su actuación fue tan decepcionante que desde entonces el entrenador extremeño solo le ha dado 20 minutos en seis partidos. De ellos, 13 ante el Espanyol en Liga y 7 frente a la Juventus en la Liga de Campeones. Es decir, dos partidos totalmente decididos y en los que hubo bastantes minutos de la 'basura'.

Así que para eso ha quedado el supuesto 'crack' portugués. Al nuevo entrenador le bastó verle en acción en un partido importante para captar el mensaje de que es un futbolista que no tiene el nivel para jugar en un club como el Barcelona. Gomes le ha decepcionado en sus primeros tres meses en la Ciudad Condal y ya está dejando claro con sus actos que solo cuenta con él para dar descanso a los futbolistas más importantes de la plantilla cuando los encuentros ya están plenamente decididos.

El Tottenham sigue confiando en el portugués

Por eso no es de extrañar que ahora el Barcelona ande trabajando para 'colocar' al centrocampista. Durante el verano se rumoreó sobre un interés de la Juventus, aunque en Italia a la hora de la verdad no se atrevieron a apostar por él. Y ahora en Inglaterra se apunta a una posible oferta del Tottenham de unos 23 millones de euros. Y es que lo único que parece claro en este caso es que si el Barcelona quiere quitarse de encima a Gomes va a tener que 'tragar' con una oferta sensiblemente inferior a los 35 millones que se dejaron en su fichaje hace ahora 14 meses.

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Gomes, de fichaje estrella a lastre que nadie quiere llevarse (29-08)

El Barcelona ya ha entrado en una rápida cuenta atrás para cerrar su plantilla al gusto de Ernesto Valverde. Durante todo el verano el conjunto culé se ha hecho el remolón a la hora de llevar a cabo las salidas, ya que ha centrado sus esfuerzos en contratar a jugadores para reforzar el equipo. Así, ahora los azulgranas se encuentran con un claro excedente de futbolistas y con el problema de no saber dónde 'poner' a los dos o tres descartes más claros de su plantel.

El Barça necesita más liquidez para cerrar dos nuevos fichajes

Con Semedo, Paulinho y Dembélé como caras nuevas, el Barcelona pretende todavía a dar salida a algunos de sus futbolistas para poder encarar con garantías económicas las dos últimas operaciones que pretende en este mercado de fichajes. Las llegadas del brasileño y del francés han hecho que el equipo azulgrana haya gastado 145 millones de euros fijos más otros 45 posibles en bonus de los 222 'kilos' que ganó por la salida del brasileño Neymar.

La aspiración de Bartomeu y su directiva es darle a su afición las alegrías de Coutinho y Di María. Sin embargo, estas dos operaciones podrían conllevar otros 220 millones de euros en gastos, unas cantidadque solo se podía afrontar abriendo la puerta de salida. Y entre los candidatos a segur este camino se encuentra André Gomes, un jugador que parece completamente sentenciado a pesar de que hace poco más de un año la prensa culé se felicitaba por habérselo arrebatado al Real Madrid.

El orgullo culé, una traba más para la salida de Gomes

El portugués valió 35 millones de euros fijos (más 20 en variables), por lo que ahora el Barcelona quiere recuperar esta cantidad con otro traspaso. Pero en el proceso está pasando por algo dos aspectos: uno, que el verano pasado pagó más dinero por él del que era su precio real; y dos, que en la última temporada Gomes perdió valor por su pobrerendimiento. Así que ahora con razón no hay nadie que esté en disposición de alcanzar ni 40 millones de euros por este jugador.

En los últimos días la Juventus llegó preguntar por él, pero al saber de las pretensiones de los azulgranas decidió rechazar su fichaje. Así que el problema sigue estando en el tejado del Camp Nou, porque en este caso su peor enemigo es su propio empecinamiento de no dejarle ir si no es por una cantidad similar o superior a la que abonó al Valencia en 2016. Y es que dar por buena una propuesta menor sería lo mismo que admitir la realidad de los hechos: que el fichaje de André Gomes fue una auténtica calamidad para el club...