Tras estar 20 años al frente del Arsenal Arsene Wenger es un hombre escuchado y respetado en el mundo del fútbol. Por eso en las últimas horas el francés ha decidido alzar la voz para criticar un hábito implantado en este deporte desde hace muchos años, el de abrir el mercado de fichajes en enero para que los clubes puedan reforzarse si en el primer tramo de la temporada las cosas no han ido como esperaban.

Pide una medida contundente

El máximo responsable deportivo de los 'gunners' ha sorprendido a todo el mundo en una entrevista que ha concedido para la cadena 'BeIN Sports'. Con toda su experiencia acumulada considera que "los futbolistas que no juegan o que en verano se quedaron sin fichar por otro equipo en octubre podrán empezar a pensar '¿qué ocurrirá en enero? Creo que no es una buena manera de estar en un vestuario". De ahí que Wenger apueste por una medida contundente para evitar este problema.

"Creo que la situación ideal para evitarlo sería tener un mercado de fichajes que se cierre desde 48 horas antes de iniciarse el campeonato y que no se vuelva a abrir hasta el siguiente año" agregó el francés. E incluso ha asegurado que se trata de una cuestión de "decencia". "Todos nos quejamos de que el fútbol se ha convertido demasiado en un negocio, pero creo que podemos hacer algo al respecto. Tenemos esa responsabilidad" finalizó.

Curiosamente estas declaraciones llegan después de que el Arsenal no haya aceptado traspasar a Alexis Sánchez a pesar de que el futbolista finaliza su contrato con los londinenses el próximo 30 de junio. La decisión de Wenger y del club es que el chileno cumpla con lo firmado, incluso bajo el riesgo de que pueda abandonar el Emirates el próximo verano y con la carta de libertad... o incluso de que pida su salida en enero, algo que el veterano entrenador parece estar temiendo.