El dinero del fútbol chino lleva ya un tiempo irrumpiendo en el resto del mundo y ha servido en varias ocasiones ya para conseguir convencer a jugadores impensables de su marcha a una liga menor como la Superliga China. Sin embargo, cuando un equipo asiático llega con muchos billetes en un maletín dispuestos a ponerlos encima de la mesa parece que las intenciones se le cambian a muchos.

Uno de ellos fue Carlos Tévez. El delantero, ya en el tramo final de su carrera deportiva con la treintena de años más que sobrepasada, recibió a finales del pasado 2016 una de esas ofertas ‘bombazo’ del fútbol chino que no se atrevió a rechazar ya que le convertían en uno de los futbolistas mejor pagados del planeta pese a que tenía que abandonar el club de su vida, Boca Juniors.

Una cifra millonaria

El Shanghai Shenhua, su actual club, no miró el bolsillo a la hora de hacer una oferta a Carlos Tévez y fue más generoso que con nadie. Le ofreció la escandalosa cifra de cuarenta millones libres de impuestos por tan sólo dos temporadas a razón de 20 kilos cada una de ellas. A Tévez le hicieron los ojos chiribitas y decidió dejar a Boca para marcharse a una Liga que pese a que está haciendo grandes esfuerzos no está en el mapa del primer nivel y le queda mucho aún para ello. 

Además, no sólo eso, sino que el Shangai Shenhua también tuvo que desembolsar otros once millones de euros a Boca para que el jugador pudiera salir ya que tenía contrato vigente con los argentinos. Un desembolso, por lo tanto, de una gran magnitud.

Ahora dice que quiere volver

Sin embargo, y pese al esfuerzo que han hecho por él y todo el montón de billetes que le han puesto encima de la mesa ahora Carlos Tévez dice que echa de menos a Boca y que quiere regresar. Es decir, que parece que ni siquiera se plantea cumplir su corto contrato y que quiere cortarlo a mitad del compromiso, cuando se termine la presente temporada por el mes de noviembre. Eso sí, los 20 kilos que ya tiene en el bolsillo parece que no se los va a quitar nadie. 

Así se ha encargado de decirlo él mismo  públicamente, es decir, ni siquiera esconde ya sus deseos de ‘fugarse’ de China para volver a Argentina: "Extraño ponerle la camiseta de Boca, saber que toda mi familia está en la cancha. Eso lo extraño mucho, más los domingos", aseveró echando el anzuelo para que su ex equipo quiera repescarle y admitirle después de su marcha.

"No tengo redes sociales y leo poco los diarios de Argentina así que me entero más por mi hermano. Hace mucho que no hablo con Angelici, desde que Boca salió campeón. Tenemos una reunión pendiente en diez días y hablaremos de todo. Estoy muy bien acá, con mi familia. La decisión pasa por uno, pero esa decisión no la tomé. Cada vez se me hace más difícil. Cuando esté en Buenos Aires veré que voy a hacer", dijo sobre su futuro, que parece lejos de China.

Además, habló de los motivos por los que quiere regresar a Boca, que no son otros que los de retirarse ganando la Copa Libertadores: “Mi motivación para volver es la misma que la de todos los hinchas: ganar la Copa Libertadores y salir por la puerta grande. Ttambién es difícil irse por la puerta grande de este club. Porque si ganas la Copa, después te dicen que no te puedes retirar justo ahí, que tienes que ganar otra". El argentino parece no estar demasiado a gusto en China, donde también ha recibido críticas por su rendimiento.