¿Se acuerdan lo que decían en Barcelona del Real Madrid cuando Mourinho lo entrenaba? Los culésmás puristas acusaban al equipo blanco de no centrarse en el fútbol exclusivamente y de utilizar otros elementos de los partidos para descentrar a los rivales y ganar los partidos. El llamado 'otro fútbol' molestaba a ciertos barcelonistas, quienes aseguraban que su equipo solo buscaba jugar bien y ganar respetando las reglas de este deporte.

¡Cuánto han cambiado las cosas de la etapa de Guardiola a la actual de Valverde! Y es que ahora este Barcelona no juega ni a las tabas. Es cierto que hasta ahora está ganando sin parar (a excepción de la Supercopa de España), pero más por suerte o por simple inercia. Porque lo que es jugar bien al fútbol... prácticamente nada.

Ganar... como sea

En el Camp Nou ya no presumen de comer caviar. Es más, ahora hacen lo que hasta hace poco reprobaban. Si van ganando en Lisboa gracias a un gol en propia puerta y de rebote no tienen problema en mirar el reloj y aliarse con las marrullerías para llevarse los tres puntos. Por eso el pasado miércoles Luis Suárez se pilló un rebote considerable con su entrenador al ser sustituido.

En un principio parecía que el charrúa estaba enfadado por el cambio, pero finalmente se filtró que todo se debía a que el jugador se molestó porque no le avisaron antes de la sustitución y no se puedo ir lejos de la banda para perder el tiempo. El propio Valverde reconoció tras el partido que el mosqueo no había sido por su decisión, aunque demostró avergonzarse por el verdadero motivo del mismo, ya que señaló con una sonrisa que este era "secreto profesional".

Cambio radical de filosofía en cuestión de 5 años

Así que así está el poderoso Barcelona. 0-1 en el estadio del Sporting de Portugal y gracias. Jugando mal, con un gol de suerte y al final pidiendo la hora. Los mismos que hace un lustro presumían de hacer el mejor fútbol del mundo y de no conformarse solo con ganar... ¡Quién les ha visto y quién les ve!

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La fea manera en la que el Barça quiso abaratar el precio de Suárez

El Barcelona es un club que presume constantemente de tener 'valores', pero que a la hora de la verdad pone pocos reparos para conseguir sus objetivos. Y el fichaje de Luis Suárez es un buen caso para demostrarlo, porque recientemente se han dado a conocer nuevos detalles de cómo el conjunto culé intentó usar todos los argumentos a su alcance para que el Liverpool diera su brazo a torcer. Incluidos los carentes de ética...

La anécdota la ha filtrado Ian Ayre, quien durante el verano de 2014 era el Jefe Ejecutivo del Liverpool. En ese momento el club inglés y el Barcelona ya estaban negociando por el traspaso de Luis Suárez y la intención del conjunto azulgrana era rreducir lo máximo posible los más de 80 millones de euros que pedían por el futbolista.

"Mi venta más difícil fue la de Suárez, porque nadie quería que se fuera, pero había mordido a alguien durante el Mundial. Recuerdo que durante el Uruguay-Italia me llamó el Director Deportivo del Barcelona (Zubizarreta) inmediatamente después de que mordiera Suárez a Chiellini. Y me dijo: 'amigo mío, acaba de morder a otro jugador. ¿Cuál puede ser el precio de ahora?' Y yo le respondí: '¡ya había mordido a alguien cuando cuando presentásteis vuestra primera oferta!'".

De esta forma, a pesar de intentar aprovecharse de un episodio tan lamentable como este, al Barça no le quedó más remedio quetragar y fichar al futbolista por una cifra ligeramente superior a los 80 millones de euros. Ni siquiera la sanción de cuatro meses que la FIFA impuso a Suárez sirvió para rebajar su precio, por lo que el Liverpool acabó siendo el gran beneficiado de este traspaso.