Mateo Kovacic se ha ganado por méritos propios ser el gran 'tapado' del principio de temporada merengue. El croata ya regresó tras las vacaciones en un excepcional estado de forma, y se encargó de demostrarlo en la gira de pretemporada que el equipo realizó por los Estados Unidos. Sin embargo, su gran explosión se terminó por producir en los dos partidos de la Supercopa de España, en los que simplemente estuvo imperial en una parcela que teóricamente no es la que más domina.

Exhibición ante el Barcelona

Zidane pidió que el croata se colocara como mediocentro defensivo. Esta es una posición en la que no se ha prodigado mucho en los dos años que lleva en el Real Madrid. Además, para colmo, el míster quería que tapara a Leo Messi en los dos duelos ante los culés. Para muchos otros hubiera sido una tarea titánica que podría haber acabado con su confianza, pero para Kovacic solo fue 'trabajo de oficina'. Y es que el joven jugador 'secó' al astro argentino y se ganó la admiración total del madridismo.

El ex futbolista del Inter demostró que además de un espléndido interior también puede ser un mediocentro defensivo de lujo. Tiene todo para jugar por delante de los centrales porque posee potencia, regate, pase e inteligencia para sacar el balón sin problemas. Así que el Real Madrid ya ha constatado que en la medular tiene a un auténtico multiusos que vale como un tesoro. De hecho, resulta evidente que el jugador se ha revalorizado considerablemente en este puñado de encuentros veraniegos.

Una 'joya' que no está en el mercado

Hace poco más de un mes clubes como el Tottenham o la Juventus llegaron a ofrecer 25 millones de euros por Kovacic. Cantidad que el Real Madrid consideró ridícula por haber invertido en él 31 'kilos' hace dos veranos. Y solo han hecho falta un puñado de semanas para confirmar que el campeón de Europa estaba en lo cierto. De hecho, ahora mismo existe el convencimiento en Concha Espina de que el valor real del croata podría superar considerablemente los 50 millones de euros.

Con 23 años y talento para dar y tomar, Kovacic ya es por méritos propios uno de los centrocampistas más prometedores de Europa. El Real Madrid le incorporó en 2015 por recomendación expresa de su amigo Luka Modric, ya que este le veía como su sucesor en la selección ajedrezada y en el equipo español. Y ahora, dos temporadas después, no hay nadie que no aplauda esta decisión. Porque aunque (como todos) puede que Kovacic tenga un valor de mercado, en realidad el conjunto merengue considera que es un futbolista intransferible que no tiene precio.

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En abril pasado Kovacic y mostraba su absoluta paciencia camino del éxito (30-04)

Además de ser un gran jugador, Mateo Kovacic está demostrando en el Real Madrid tener la cabeza muy bien amueblada. El croata cumplirá 23 años el próximo día 6 de mayo, pero no parece tener ninguna prisa por echar abajo la puerta del equipo blanco. De hecho, en realidad prefiere ir progresando poco a poco y cumplir con el rol que le ha asignado Zinedine Zidane para llevar a cabo una 'transición dulce' en la medular junto a su compatriota y amigo Luka Modric.

El '19' merengue tiene siete años y medio más que Kovacic, por lo que es solo cuestión de tiempo que le acabe pasando el testigo tanto en la selección balcánica como en el equipo español. Cuando el Real Madrid fichó a Mateo hace ahora casi dos años lo hizo mirando hacia el futuro y con la perspectiva de que podía acabar convirtiéndose en un hombre habitual del once titular merengue. Y este supo captar a la perfección este mensaje, ya que asumió que en sus primeros años la prioridad iba a ser trabajar duro y aprender para recoger los frutos tiempo después.

Y en ese proceso se encuentra actualmente, labrándose un camino paso a paso y día a día. De hecho, en el club gustaron mucho las palabras de su agente, Nikky Vusan, en las que explicaba que Kovacic "no está jugando poco. El Madrid es el campeón de Europa y tiene a los mejores del mundo, así que también tiene el mejor centro del campo. El futbolista está muy feliz en Madrid y el club también lo está con él. No sé lo que pasará dentro de cinco años, pero mi única convicción es que ningún jugador del mundo puede rechazar a este club... salvo Totti".

En las oficinas de Concha Espina entienden que estas palabras demuestran que Kovacic ha entendido muy bien lo que el club le pide, por lo que están encantados con su rendimiento en el campo y con su comportamiento fuera de él. Que el croata sea ahora mismo el 13º jugador con más minutos (con cerca de 2.000) de la primera plantilla no es coincidencia, y tanto Zidane como la directiva tienen claro que si continúa teniendo paciencia y mantiene esta actitud no tardará en estar entre los once que más juegan. Es una simple cuestión de meritocracia...