A Rey 'muerto'... Paulinho 'puesto'


2017-09-23 12:09 Europa Por: Fichajes DC

Messi y Luis Suárez se quedaron muy tocados este verano cuando supieron que Neymar Jr. había decidido dejar el Barcelona. Al argentino le dolió especialmente la decisión del que era hasta entonces su amigo, porque este no se mostró dispuesto a seguir a su sombra varios años más. El '10' sabe que con el brasileño a su pleno servicio vivía mejor, por lo que lo pasó mal las primeras semanas en las que experimentó la ausencia del tercer miembro del tridente.

Por ello el argentino y el uruguayo junto a parte de la plantilla azulgrana no tardaron en visitar a Neymar una vez que este oficializó su fichaje por el PSG. El brasileño recibió a sus amigos en su casa de Barcelona y organizaron una pequeña fiesta de despedida mientras desafiaban a la directiva del club, la cual en esas fechas había procedido a denunciar a la su antigua estrella por no cumplir con el contrato de renovación que había firmado a finales del año pasado.



Los dos 'cracks' del Barça cubren el vacío con un amigo de Neymar

Sea como fuere, Neymar ya es historia para el Barcelona, así que Messi y Luis Suárez están teniendo que mirar al frente. El vacío que ha dejado el '11' en el vestuario ha sido muy grande, pero ahora se están intentando llenarlo como pueden. Y en ese sentido les está ayudando la llegada de otro brasileño. Según apunta la prensa culé, Paulinho ha sido recibido con los brazos abiertos por parte de las dos grandes estrellas que quedan en el plantel, de forma que estos se están preocupando de hacerle más sencilla la adaptación.

Además, el diario 'Sport' asegura que el centrocampista se está planteando buscar su nuevo domicilio cerca de donde se alojan el charrúa y el argentino, de forma que puedan labrar una amistad fuera del campo. No en vano, hay que recordar que Paulinho también es amigo personal de Neymar, por lo que el propio delantero podría haber pedido a sus ex compañeros que se encarguen expresamente de que su aterrizaje en Barcelona sea lo más sencillo posible.

La sombra de Neymar seguirá siendo muy alargada en Barcelona

Así pues, por ahora Paulinho ha entrado con buen pie en el vestuario. Cuenta con el visto bueno de los 'jefes' y tiene muchas opciones de ser uno de los protegidos de Leo Messi. Pero aún está por ver que su rendimiento acabe estando a la altura de su precio. Porque lo que está claro es que aunque pueda ocupar el enorme agujero emocional que ha dejado Neymar en el club, jamás podrá conseguir hacer olvidar a su compatriota en lo que respecta a fútbol, goles, asistencia y 'magia'.


Neymar sigue acumulando líos en París

Poco tiempo ha tardado el brasileño en ser protagonista en el PSG por cosas poco agradables. El pasado fin de semana ya se encaró con un compañero suyo y en Francia temen que sea un factor desestabilizador para su nuevo equipo.

Muchos grandes gallos para un mismo corral. Eso es ahora mismo el PSG, una plantilla plagada de 'cracks' que, como es habitual, cada una de ellos tiene sus altas pretensiones y exigencias. Especialmente, al parecer, uno de ellos, el que precisamente se ha convertido este verano en el traspaso más caro de la historia de este deporte.

Neymar ya es noticia en el Paris Saint Germain por una noticia negativa. Poco ha tardado porque ante el buen rendimiento futbolístico que ha ofrecido en sus primeras semanas como jugador del PSG ya se ha impuesto una sombra que lleva planeando sobre él durante toda su carrera, la de ser un jugador problemático y con un fuerte carácter.

Todo eso quedó patente a los ojos del mundo entero el pasado fin de semana. El PSG se midió con el Lyon en un partido correspondiente a la Ligue 1 y en él Neymar se enfrentó y se encaró con el uruguayo Cavani. El motivo, la decisión sobre quien iba a lanzar un penalti señalado a favor de los de Emery que finalmente terminó ejecutando y fallando el charrúa. Pero desde ahí fueron más las riñas entre ambos por acciones a balón parado y de hecho en L´Equipe llegaron a asegurar que algunos compañeros tuvieron que intervenir para separarlos tras el choque para que ambos jugadores no llegaran a agredirse en el vestuario.


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