Cesc Fábregas no termina de estar cómodo a las órdenes de Antonio Conte. Al catalán le costó ganar su confianza durante toda la temporada y en las últimas semanas había logrado convertirse en un jugador importante para el equipo. Sin embargo, su decepción fue máxima cuando descubrió que para preparar uno de los encuentros más importantes del curso el técnico no había pensado en él.

Incomodidad evidente con Conte

El internacional español consideraba que estaba en un momento ideal para ser importante en la final de Copa que disputó el Chelsea con el Arsenal el pasado domingo. Sin embargo, cuando vio la alineación descubrió que no figuraba en ella y se llevó un importante disgusto. De hecho, al final la suma de la derrota del equipo (2-1) y su enfado personal provocó que acabara 'rajando' por lo ocurrido.

"Estaba en gran forma antes de este partido y creo que fue una vergüenza que no empezara en el equipo. Pensaba que estaba jugando muy, muy bien en los últimos meses" expresó con durezca Cesc. Y agregó: "por supuesto que un jugador quiere participar más, es algo que está en los genes de un ganador y yo soy uno de ellos. Pero nunca voy a bajar los brazos y la cabeza, porque quiero pelear, estoy para lo que necesite el equipo".

Además, apuntó directamente a los motivos de esta suplencia al señalar que "se ha tratado de una decisión del entrenador que hay que respetar. Por mi parte no creo que hubiera podido hacer mucho más esta temporada". Y terminó mandando un aviso a navegantes por su evidente incomodidad: "¿Marcharme? En fútbbol nunca puedes decir nunca, cualquier cosa puede ocurrir. Pero siempre he dicho que me siento muy querido por los aficionados del Chelsea. Todo es cuestión de conseguir cambiar la opinión del entrenador"...