El Barcelona tiene claro que está ante una oportunidad de oro para 'repescar' a Gerard Deulofeu. Y poco le importa que el futbolista no quiera volver a pasar por el Camp Nou y vestirse de azulgrana, porque la decisión está prácticamente tomada: en las próximas horas harán efectiva la cláusula de recompra que tienen firmada con el club que posee sus derechos, el Everton, y le volverán a llamar a filas para la pretemporada.

Deulofeu se mantiene en su postura

En el conjunto catalán llevan varias semanas madurando la decisión y ya se la han comunicado al agente del jugador, Ginés Carvajal. Sin embargo, este ha guardado en todo momento un silencio muy elocuente que evidencia que no está por la labor de entrar en el juego del Barcelona. Deulofeu considera que el club nunca le ha demostrado su confianza y que en caso de volver vería frenada su carrera por la presencia de jugadores como Messi, Luis Suárez o Neymar. Así que su prioridad es continuar su carrera lejos de la que fue su casa durante varios años.

Una nueva venta, la mejor solución para todos

Todo esto el Barça lo sabe, así que el panorama que se le presenta no es sencillo. Está decidido a pagar los 12 millones de euros que vale el jugador, pero no quiere tenerle en su plantilla en contra de su voluntad. Así que lo más probable es que acabe haciendo otra cosa que quería evitar el propio delantero, una reventa para sacar algo de dinero por su traspaso. Según 'Mundo Deportivo' la Roma de Monchi ya ha preguntado por él y podría llegar a ofrecer 15 millones de euros por su traspaso.

De todas formas, mientras se decide el equipo azulgrana debe actuar ya. Este viernes expira el plazo que tiene para recuperar al canterano, por lo que la prioridad es completar el fichaje. Y una vez que lo haga ya habrá tiempo para que piensen en qué hacer con él, aunque como decimos la única solución que podría contentar a todos es una nueva venta. En Deulofeu no hay ni el más mínimo de atisbo de ilusión por regresar al Barcelona y ante ello no hay solución de concordia posible.

Está aún por ver cómo todo este proceso afecta a la imagen del club, porque no dejará en un buen lugar al Barcelona el hecho de que vayan a forzar a un jugador (ex canterano para más 'inri') a hacer algo que no quiere. Sin embargo, su situación económica no es la mejor y en el club están convencidos de que no les queda otra que ver a Deulofeu como un simple negocio para poder ganar algo de dinero y así tener más fácil la confección de la plantilla con la que contarán en la temporada 2017/18.