A pesar de las 'amenazas' de Zlatan Ibrahimovic y de sus evidentes flirteos con otros clubes, el Manchester United se resiste a dejar salir al sueco. El club inglés sabe que el delantero quiere garantizarse un contraro de órdago en Old Trafford, ya que en caso de no conseguirlo no le temblará el pulso a la hora de firmar con otro equipo tras salir el 1 de julio de Inglaterra con la carta de libertad.

El delantero cumplirá el próximo mes de octubre 36 años, pero todavía sigue siendo uno de los mejores del mundo en su posición. Sus 28 goles y 10 asistencias en su primer año en el Manchester le avalan, por lo que Mourinho ha decidido poner sobre la mesa toda la 'mano de cartas' con la que cuenta para convencer al futbolista de que no merece la pena que cambie de aires.

Y para ello dispone de 'artillería pesada', ya que el poder económico del United permite que el conjunto inglés esté en disposición de ofrecer a Ibrahimovic un contrato de un año valorado en 24 millones de euros netos. Es decir, una cifra que casi multiplicaría por dos la que actualmente percibe y que le colocaría por delante de Cristiano Ronaldo o incluso Leo Messi - el argentino todavía tiene pendiente su renovación con el Barcelona -.

Lo malo es que, según el diario 'Mirror', el ex del Barcelona ya le habría dejado claro a los 'red devils' que para él dinero no lo es todo y que su continuidad también dependerá de otro factor fundamental: que el United se clasifique para la próxima Champions League.

Un deseo que podría cumplirse por dos vías diferentes, ya que el equipo está a solo cuatro puntos de las plazas de Champions con un partido menos - el City es el cuarto clasificado en estos momentos - y también puede acceder a la máxima competición si gana la Europa League - actualmente disputa los cuartos de final ante el Anderlecht belga -.