Diego Pablo Simeone es un técnico que ha conseguido crear una filosofía que le representa. Su discurso del 'partido a partido' tiene a millones de adeptos en todo el mundo, pues representa la lucha y la pelea continua ante cualquier adversidad. Sin embargo, con el tiempo también ha ido quedando demostrado que el argentino no suele ser demasiado coherente al defender sus ideas, ya que en ocasiones aplica unos argumentos y otras veces dice lo contrario en función de lo que le conviene.

Aprovechando el Atlético-Barcelona que se jugó este sábado en el Wanda Metropolitano el técnico opinó el pasado viernes sobre la influencia que el césped iba a poder tener en el choque. Y el argentino fue muy contundente al señalar que "yo no soy el jardinero, solo soy el entrenador. Pero cuando tú me invitas a tu casa como con tu mantel, tus platos y tus vasos y cuando yo te invito a mi casa invito con mi mantel, mis platos y mis vasos. Así que cuando yo voy a tu casa no elijo en qué plato quier comer, sino que lo hago en el que me ofreces. Por eso uno juega como local y otro juega como visitante".

Su preparador físico le deja en evidencia

Una postura muy loable la de Simeone, que sin embargo, no aplica a rajatabla su cuerpo técnico. De hecho, el pasado mes de mayo su preparador físico 'Profe Ortega' solicitó a la UEFA que el Real Madrid regara el césped del Santiago Bernabéu antes del derbi de ida de las semifinales de Champions que disputaron los dos equipos madrileños. Y como se puede apreciar en el vídeo bajo estas líneas, el Atlético consiguió su objetivo a pesar de la negativa inicial del jardinero merengue.

Desde luego no es la primera vez que en el Barcelona se quejan del césped que les prepara Simeone para disputar un partido. El técnico apuesta por dejar alta la hierba y por no regarla, de forma que el juego de combinación de los culés no se pueda desarrollar con fluidez. Por eso Luis Enrique se quejó en la última visita de los culés, si bien la misma terminó con victoria, lo que provocó que el Cholo se defendiera y asegurara que el campo no influyó en el resultado final (1-2).

Un argumento que solo usa cuando le viene bien

Así que lo que llama la atención de todo esto es que el entrenador colchonero defienda en público su derecho a dejar el césped como quiera y luego su preparador físico vaya llorando por las esquinas para que sus futbolistas entrenen y jueguen en las mejores condiciones. O defiendes una idea o la contraria, pero no puedes amoldar las opiniones a lo que más te convenga. Pero está claro que Simeone, además de ser un gran entrenador, es un experto en el arte de la 'manipulación'...