Algo importante se está moviendo en la ciudad de Milán en los últimos días. Tanto Inter como el Milan han renovado sus plantillas este verano gracias al dinero procedente de China, por lo que ambos clubes aspiran hacer algo grande esta campaña en la Serie A. Pero los 'neroazurros' todavía están en disposición de dar un último y espectacular golpe en el mercado de fichajes, porque las últimas informaciones apuntan a que han puesto sus ojos en uno de los mayores talentos que tiene su eterno rival.

Los 'rossoneros' han realizado un montón de fichajes de cara a esta nueva campaña, pero el español Suso sigue siendo uno de los grandes referentes del equipo. El mediapunta fue titular en la victoria de los suyos (0-3) ante el Crotone en la primera jornada del campeonato liguero, y además adornó su partido con un gol y una asistencia. Más que suficiente para que el interés del Inter en su fichaje creciera aún más en las últimas horas y haya desatado los rumores sobre una posible traicidión del gaditano al heptacampeón de Europa.

El Inter necesita vender antes de plantearse este sorprendente fichaje

Según indica el diario italiano 'La Gazzetta dello Sport', el Inter de Milán está en disposición de ofrecer 25 millones de euros por el jugador, de tan solo 23 años. Aunque eso sí, ahora mismo no tendrían el dinero para hacer esta propuesta, por lo que antes tendrían que traspasar a futbolistas como Jovetic, Candrema o Brozovic para reunir esta cantidad y ponerla sobre la mesa de su vecino de ciudad, el Milan.

En todo caso, los milanistas tampoco parece que vayan a poner muchas facilidades para dejar escapar a su joven talento. Suso ya fue la gran revelación del club la temporada pasada jugando 37 partidos en total y aportando 7 goles y 11 asistencias para los suyos, por lo que no ven con buenos ojos la idea de dejarle marchar a un rival directo en la pelea por Europa y por el 'Scudetto'. De hecho, últimamente las operaciones entre estos dos equipos no han sido habituales, ya que la última de ellas data de hace cinco años, cuando el Inter pagó 5 millones al Milan por el fichaje de Antonio Cassano.