El Milan vuelve a la carga por Álvaro Morata. El futbolista podría tener ya tomada la decisión dejar el Real Madrid el próximo verano, ya que el pasado lunes no pudo evitar emocionarse mientras celebraba la Liga en la Cibeles junto con toda la afición. En ese momento las lágrimas afloraron y evidenciaron que hay algo que preocupa al futbolista y que quizá podría hacer que en cuestión de dos meses tenga que volver a hacer las maletas.

Morata empieza a dudar

El conjunto rossonero lleva tiempo tentando al canterano madridista, quien en un primer momento no se mostró muy partidario de unirse a su nuevo proyecto. El hecho de no jugar la próxima temporada competición europea y de ser uno de los grandes rivales de su querida 'Juventus' provocaron que Morata no fuera muy partidario de emprender el viaje de vuelta a Italia por este camino. Sin embargo, la dificultad de que pueda regresar a Turín y la apuesta evidente de su otro gran pretendiente (el Chelsea) por Lukaku podría hacerle cambiar de opinión.

Por lo que respecta al Milan, sus nuevos propietarios chinos quieren invertir una gran cantidad de dinero en reconstruir la plantilla. Y Morata es una opción interesante por su juventud y por lo bien que conoce la Serie A. Además, son conscientes de que la futura esposa del madrileño es italiana, por lo que este es otro factor que podría pesar en una decisión favorable. Así que el histórico conjunto transalpino maneja la posibilidad de ofrecer 60 millones de euros por el '9'.

El Madrid no pondrá fácil su salida

Sin embargo, en el Santiago Bernabéu no terminan de ver la operación. O al menos no lo hacen por esa cantidad, porque sus dirigentes han tasado al jugador en unos 75 millones de euros. Esta es la cifra que le otorgó ya hace un año durante la Eurocopa y que esta temporada no ha querido modificar ni un ápice, porque su temporada está siendo realmente buena (20 goles y 6 asistencias en 40 partidos) a pesar de no haber llegado a los 2.000 minutos de juego (1.871 minutos en total).

Así que el equipo que quiera a Morata deberá pagar su precio justo. Si por Zidane fuera el delantero seguiría en el Real Madrid, pero en el club saben que el canterano pretende jugar más y les pedirá más minutos o un traspaso. Así que ante la inviabilidad de concederle lo primero por la presencia de la 'BBC', probablemente no les quede otra que aceptar ponerle en el mercado. Y ahí es donde los directivos merengues intentarán imponer su postura y marcarle unos límites al Milan para que demuestre con dinero que quiere al internacional español.