15 de julio de 2015. Josep María Bartomeu está en plena campaña para ganar las elecciones a la presidencia culé y decide publicar el siguiente mensaje en su cuenta de Twitter: "Queremos un club independiente del poder político. El Barça es una pasión, que está por encima de ideologías y de partidos". Toda una maniobra estratégica para sumar un puñado de votos no catalanistas, pero un error a la larga que ahora está haciendo mucho daño a su imagen.

1 de octubre de 2017. El Barcelona publica un comunicado en su página Web en el que "condena las acciones llevadas a cabo hoy en muchas localidades de toda Catalunya para impedir el ejercicio del derecho democráctico y la libre expresión de sus ciudadanos" y justifica su decisión de disputar el encuentro ante Las Palmas en el Camp Nou y a puerta cerrada.

Dos mensajes distintos, misma ideología

Entre ambos mensajes han pasado algo más de dos años, aunque realmente no ha cambiado nada en la directiva culé y en el Barcelona. Siempre han sido los mismos y han tenido la misma ideología independentista. Sus problemas con la UEFA por el lucimiento de esteladas en los partidos de Champions así lo demuestran, como la felicitación pública que le hicieron a Carles Puigdemont a su llegada a la presidencia de la Generalitat en enero de 2016 en la que hablaba de "etapa histórica y apasionante que hoy inicia nuestro país, Catalunya".

Y como estos hay muchos más ejemplos. Porque este Barcelona es un club utilizado como herramienta para los fines partidistas de sus dirigentes y de los poderes políticos de Cataluña. Algo loable aunque discutible. Pero lo que realmente deja en evidencia a este Barcelona es su intento de esconder la realidad y su negación de los hechos.

Directiva sin escrúpulos

Desde luego no es la primera vez que se le pilla al presidente del Barcelona con una flagrante mentira. Pero esta es una de las peores porque la dijo con el objetivo de ganar apoyos a cuatro días de las elecciones de su club. Y es que así es esta directiva. No tiene ningún escrúpulo y no le importa engañar a sus socios con tal de conseguir sus objetivos. Algo que, por otra parte, a estos tampoco parece importarles mucho... Y si no que se lo digan a Agustí Benedito, quien no ha podido sacar adelante su moción de censura por falta de apoyos.

Queremos un club independiente del poder político. El Barça es una pasión, que está por encima de ideologías y partidos #BoPerAlBarça

— Josep Maria Bartomeu (@jmbartomeu) 15 de julio de 2015

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— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 1 de octubre de 2017