Marco Verratti es un futbolista que lleva años en la agenda del Real Madrid. El club blanco siempre ha tenido admiración por los centrocampistas finos y de calidad, si bien en las últimas temporadas no ha terminado de lanzarse a por su fichaje al contar con jugadores de la calidad de Modric y Kroos para la medular. Sin embargo, esta situación podría cambiar de cara a la próxima temporada ante las dudas que envuelven el futuro de jugadores como Isco y James Rodríguez.

Si el malagueño o el colombiano acabaran abandonado el Real Madrid durante el verano el campeón de Europa se plantearía el fichaje de otro centrocampista de primer nivel para cubrir su(s) ausencias. Y uno de los primeros candidatos sería el mediocentro del PSG Marco Verratti. El transalpino es uno de los pocos organizadores de primer nivel que hay en el fútbol mundial y además auna juventud y experiencia, pues a sus 24 años suma ya cuatro temporadas al máximo nivel. Aspectos que el equipo español valora muy positivamente a la hora de plantearse su fichaje, pero que a su vez contrastan con la actitud del futbolista.

Y es que Verratti está demostrando ser un futbolista algo indeciso. En los dos últimos años no han faltado los rumores sobre su hipotética salida de París, pero él nunca ha terminado de 'mojarse'. El nombre del Real Madrid siempre ha revoloteado alrededor suyo, pero en la mayoría de las ocasiones lo único que ha dicho el futbolista es que su deseo era continuar en el Parque de los Príncipes. Algo que lógicamente irrita en Chamartín, ya que no perciben que Marco esté muy ilusionado con vestir algún día de blanco. Algo que sí ocurre con otros futbolistas como Mbappé o Dybala, quien ya han tenido anteriormente 'guiños' al club merengue.

Por lo tanto, en Madrid no terminan de tener claro que Verrati sea un futbolista con 'ADN' madridista. Su neutralidad desconcierta y no le ayuda a la hora de que Zidane y su cuerpo técnico valoren su fichaje. En el club piensan que el italiano no sería capaz de presionar a su club para conseguir su salida en caso de necesidad, y esta sensación pueden acabar siendo decisiva a la hora de tomar la decisión de si se pone o no toda la carne en el asador por su fichaje.