Unai Emery vive ajeno a los rumores que le colocan fuera del PSG tras la debacle que sufrió el equipo en la Champions ante el Barcelona. El técnico confía en que el club respete su contrato, por lo que ya está planificando la próxima temporada. Y una de sus prioridades será reforzar el lateral izquierdo, donde no hay intención de renovar el contrato de Maxwell. El jugador cumplirá 36 años el próximo mes de agosto y finaliza su vinculación con el equipo galo el próximo 30 de junio, de forma que la necesidad de fichar un recambio se está haciendo evidente.

Por eso Emery ya ha dado un primer nombre para que la directiva empiece a trabajar de cara a este verano. Según la prestigiosa revista 'France Football' al vasco le gusta mucho el culé Jordi Alba, por lo que considera que sería un magnífico refuerzo para el equipo. De hecho, el entrenador conoce muy bien al futbolista desde la época en la que ambos coincidieron en el Valencia, por lo que el propio Alba no verían con malos ojos volver a reencontrarse con el que fue su mentor.

Además, esta operación permitiría que el PSG se cobrara una pequeña venganza contra el Barcelona aprovechando que el jugador está viviendo su peor temporada en el club catalán. Y es que, aunque en los últimos partidos Alba ha recuperado la titularidad gracias al regreso de Luis Enrique al 4-3-3, a nadie se le escapa que en los últimos meses ha pasado momentos muy duros al verse en el banquillo por la decisión del técnico en varios partidos de prescindir de los laterales.

De todas formas, la salida del asturiano el 30 de junio puede hacer que Alba reconsidere su postura y se plantee continuar, por lo que el equipo francés y Emery deberán remangarse si quieren cerrar esta operación. Y para ello contarán a su favor con el interés culé en Aurier, de manera que no se puede descartar que el francés acabe siendo empleado como 'moneda de cambio' para abaratar la llegada del internacional español, la cual podría estar tasada en cerca de 40 millones de euros.