Kylian Mbappé valora quedarse un año más en el Mónaco. El delantero nunca ha negado que ve posible jugar esta temporada en el Principado para asegurarse tener minutos y continuar con la progresión mostrada en su primer año en la élite. Pero el jugador también quiere que su club le de garantías de que será lo suficientemente competitivo como para poder a aspirar a igualar lo que hicieron la campaña pasada. Es decir, a intentar al menos revalidar el título de Ligue-1 y hacer un magnífico papel en Champions tras alcanzar las semifinales en su última edición.

Llegadas con riesgo

Sin embargo, el futbolista ha contemplado este verano con cierta tristeza cómo el club se iba desprendiendo de algunos de sus mejores futbolistas. Primero fue Bernardo Silva, luego Bakayoko, más tarde Mendy... Grandes jugadores se han ido a otros clubes por mucho dinero y hasta ahora solo ha llegado al club el joven Youri Tielemans con vitola de estrella. Otros como Diakhaby, Kongolo, Meïté o Mboula solo son prometedores jugadores, pero aún les queda para consolidarse en la élite.

Así, Mbappé ya le ha mostrado su digusto a los dirigentes monegascos y estos se han apresurado a garantizarle que otros pilares fundamentales como Fabinho o Lemar no se marcharán. De hecho, su presidente Vasilyev aseguró hace unos días que estos dos jugadores son intransferibles. Todo con tal de que el delantero no pierda la ilusión y siga sintiéndose arropado por una plantilla competitiva y con hambre de éxitos.

El Mónaco pierde competitividad

Por eso en los últimos días le han tendido la mano y le han ofrecido la renovación. Al fin y al cabo el club ha ingresado ya más de 150 millones en fichajes y tiene dinero suficiente para darle un mega-contrato. Pero esta por ver que esto sea suficiente para el protagonista de esta historia, porque a sus 18 años Mbappé es muy ambicioso. Y no quiere verse relegado con su equipo a comparsa del fútbol francés, sobre todo si al final el PSG cierra el fichaje de Neymar Jr.

El atacante ya sabe que en Mónaco puede ser 'cabeza de ratón', mientras que su marcha le obligaría a convertise en 'cola de león' en un Real Madrid, un Barcelona o un Manchester City. Pero si se queda en su club probablemente tenga pocas opciones de conseguir grandes cosas a nivel colectivo. La realidad es que el equipo del Principado se ha desmantelado tras su inolvidable última temporada y eso a Mbappé no le está haciendo ninguna gracia. Así que a la hora de tomar la gran decisión de su futuro también tendrá esto muy en cuenta...