Andrés Iniesta solo sabe dónde va a jugar en esta temporada 2017/18. Pero a partir de ahí su futuro es una incógnita. En la propia prensa culé reconocen que en estos momentos su renovación está totalmente "congelada" por expreso deseo del manchego. Y es que a sus 33 años tiene serias dudas de que pueda seguir rindiendo al máximo nivel más allá del próximo verano.

Un año de análisis y autoexamen

El manchego es un hombre bastante juicioso que no quiere repetir lo vivido por Carles Puyol hace unas temporadas. Su amigo acabó retirándose lastrado por las lesiones, sin prácticamente poder aportarle nada al equipo dentro del campo. Así que tiene decidido que solo jugará en el Barcelona mientras sienta que está a tope tanto mental como físicamente.

Y esto implica ir año a año en su propia valoración sobre su fútbol. A partir de ahora Iniesta se autoexaminará para ver si su rendimiento está acorde a lo que se espera de él. Y en caso de que las sensaciones sean negativas no tendrá ningún problema en anunciar su salida. De ahí que vaya a ser un largo año de tensión para la afición culé ante la incertidumbre que plantea su estrella.

Iniesta apunta a Catar por recomendación de Xavi

En todo caso, Iniesta tiene decidido que el Barça no será la última parada en su carrera. Su amigo Xavi Hernández ya le ha vendido las bondades del fútbol catarí y le ha tendido la mano para que le acompañe en esa aventura una vez que decida dejar LaLiga española. Allí también quieren que el de Fuentealbilla sea 'embajador' del Mundial que se disputará en 2022 y están dispuestos a pagarle mucho dinero para conseguirlo.

Y por todo ello el Barcelona anda estos días desesperado por convencer a Dani Ceballos. En el club saben que les quedan pocos meses de disfrutar de Iniesta. Y la idea de tener un centro del campo sin Xavi e Iniesta es demasiado dura para los culés que hace poco más de un lustro disfrutaban con el fútbol de Pep Guardiola... Pero todo tiene un final y en el Camp Nou deben irse preparando para el adiós de Don Andrés.