La vida de Juan Carlos Unzué ha sido como una montaña rusa en los últimos días. El técnico navarro ha pasado en poco menos de dos meses de ser el candidato número 1 a suplir a Luis Enrique en el banquillo culé a quedar prácticamente descartado y relegado a un segundo plano. Por eso lleva varios días moviéndose para planificar su futuro lejos del Barcelona e iniciar una trayectoria en solitario alejado del asturiano.

El enfrentamiento con Neymar, el desencadenante

Para el entrenador todo cambió hace unas semanas cuando 'osó' enfrentarse a Neymar durante un entrenamiento del primer equipo. Unzué le habló claro al brasileño y le dejó claro que su vida privada amenazaba su carrera profesional, lo cual no gustó nada a la estrella del equipo y a sus amigos del vestuario. Así, desde ese momento el club le puso la cruz y sus opciones para quedarse en el banquillo azulgrana se esfumaron por completo.

El propio entrenador entendió las consecuencias de su decisión y se limitó a trabajar con normalidad para acabar la temporada de la mejor forma posible. Y en esas está en estos últimos días, a la espera de afrontar el sábado la final de la Copa del Rey ante el Alavés. Aunque en el fondo, Unzué ya empieza a tener la cabeza en otro lado.

Regreso al club en el que trabajó un año

Al parecer, el hasta ahora ayudante de Luis Enrique recibió hace unos días la llamada de un club que le conoce bien, el Celta de Vigo. Berizzo acababa de dar por concluida su etapa en la ciudad y su nombre era uno de los primeros de las quinielas por varias razones. La primera, el año que pasó en Balaídos junto al propio 'Lucho'; y la segunda, el buen trabajo que ha realizado en Barcelona las tres últimas temporadas.

Así pues, el interés es mutuo y si nada se tuerce el Celta podrá anunciar la noticia a lo largo de la semana que viene, una vez que Unzué haya acabado su trabajo en Barcelona con la disputa de la final de la Copa del Rey. Y con ello el navarro podrá afrontar su primer gran reto en solitario en la élite del fútbol, después de haber dirigido ya con anterioridad, pero sin éxito, al Numancia de Soria (2010/11) y al Racing de Santander (2012).