No lleva ni dos semanas en el Barcelona, pero Ernesto Valverde empieza a darse cuenta de lo que supone dirigir a un gran club como el culé. El extremeño tendrá la posibilidad de realizar algunos refuerzos de primer nivel para la plantilla, pero el precio que tendrá que pagar por ello será perder 'libertad' a la hora de trabajar. Y es que en la prensa de Barcelona han anticipado que la contratación de un futbolista como Ousmane Dembélé vendría con una imposición añadida: la de jugar con un esquema determinado para meter con calzador al francés.

A lo que les 'obligaría' Dembélé

Antes de llegar al club el entrenador sabía perfectamente que la 'MSN' iba a ser intocable en su nuevo proyecto. Así que a la hora de elegir el once solo iba a poder designar realmente a 8 futbolistas. Y ahora, pocos días después de haber firmado este nuevo contrato, la directiva pretende coartarle un poco más trayendo a la joven promesa del fútbol galo. Más que nada porque Dembélé ya ha dejado claro que no fichará por el Barça si no es para ser un titular habitual en el equipo.

De hecho, el delantero rechazó al Barcelona el pasado verano precisamente por esa razón. Prefirió marcharse al Borussia Dortmund porque su proyecto le garantizaba muchos minutos. Y la apuesta le dio un magnífico resultado, de forma que ahora no va a dar marcha atrás y estropear todo lo conseguido en la última temporada para quedarse en el banquillo del Camp Nou. Si da el paso lo hará con la garantía de ser un jugador titular y eso va a depender exclusivamente de Ernesto Valverde.

Messi, otro de los perjudicados

Así que en la prensa catalana ya andan buscando la fórmula para imponerle al técnico la nueva táctica. 3-4-3 o 4-2-3-1 para que Dembélé pueda jugar desde el principio junto a Neymar, Messi y Luis Suárez. Lo que, a su vez, provocaría que cambiara el papel del 'rey' Messi, porque este se vería obligado a retrasar su posición y actuar más como un mediapunta, lo que probablemente le haría marcar menos goles y le convertiría más en un asistente.

Está por ver que finalmente el francés fiche por el Barcelona, pero visto lo visto Valverde ya puede ir 'rezando' para que la operación no se complete. Añadir otro jugador netamente ofensivo al 'XI' habitual del Barcelona podría terminar por descompensarlo por completo y generar un caos absoluto. Y si no, que se lo recuerden al Madrid de los 'galácticos', que a pesar de tener a los mejores futbolistas de su época no brilló como se esperaba por no contar con ese equilibrio que todo gran equipo necesita.