José Mourinho tiene claro que este verano va a pelear con uñas y dientes por la continuidad de David de Gea en Manchester. El luso le considera un pilar básico de su proyecto a medio y largo plazo en Old Trafford, por lo que está dispuesto a guiarse por el 'librillo' que hace dos años protagonizó Louis Van Gaal.

El holandés fue clave en el verano de 2015 para que el Real Madrid no pudiera cumplir su objetivo de hacerse con el guardameta a pesar de tener cerrado su fichaje el último día del mercado. El equipo inglés estiró al máximo la operación junto a la que debía llevar a Keylor Navas a la Premier, por lo que a día de hoy David sigue vestido de 'red' y tiene a 'The Special One' como manager general.

Así que el portugués no quiere ser menos que Van Gaal y quiere enrocarse de la misma manera para que el portero no salga este verano. En los últimos días ha criticado veladamente al jugador por considerar que se estaba confiando y acomodando en su puesto, pero solo es una estrategia para motivarle en su día a día. En el fondo le considera tan importante que busca 'picarle' en su orgullo para obtener su mejor rendimiento.

De hecho, esta semana el propio entrenador ha hablado sobre los rumores y ha explicado que no está "interesado en las especulaciones y creo que si el jugador lo está no debería, porque estamos jugando partidos importantes y cada encuentro es crucial en la Premier League. (...) En el caso concreto de David no veo un problema con él, al final de la temporada es cuando los jugadores podrán pensar sobre su futuro"