El Sporting de Portugal ha cerrado una nueva temporada con decepción. El conjunto lisboeta solo ha podido ser tercero en la liga portuguesa, mientras que en la Copa no pasó de cuartos de final y en la Champions League quedó apeado en la fase de grupos tras tener una trayectoria lamentable en los seis partidos. Por eso el club intentará reforzarse con solidez en las próximas semanas e intentará encontrar futbolistas que puedan mezclar veteranía y experiencia.

Una de las parcelas donde la escuadra considera que tiene que mejorar es la defensa. De ahí que se haya fijado en dos futbolistas de LaLiga española que juegan en sus principales equipos. El primero es el madridista Fabio Coentrao, quien según las últimas informaciones tiene muy cerca apalabrar su fichaje por la escuadra portuguesa a través de una cesión por una temporada. Y el segundo es el culé Mathieu, quien también está desde hace semanas en la rampa de salida del conjunto catalán. 

El Barça, como loco por traspasar a Mathieu

En el caso del barcelonista el jugador no viste la camiseta azulgrana desde el pasado mes de abril, cuando su equipo cayó goleado con estrépito en Turín (3-0) ante la Juventus. Ese día Luis Enrique le puso la 'cruz' y no parece que ahora la llegada de Valverde al equipo vaya a cambiar mucho su situación. A sus 33 años su recorrido en la Ciudad Condal no da mucho más de sí y el Barça quiere quitárselo de encima de la forma que sea.

De hecho, en el Camp Nou podría valorar incluso darle la carta de libertad al futbolista o cederlo durante el año que le resta de contrato, así que el Sporting sabe que tendría bastante fácil la llegada del francés. Aunque la incógnita es si realmente estará interesado en su fichaje a sabiendas de que también tiene prácticamente atado a Coentrao, toda vez que tanto el portugués como Mathieu acostumbran a jugar en la banda izquierda.

Rivales ahora, ¿compañeros en julio?

En este sentido la polivalencia del aún jugador barcelonista podría jugar a su favor, ya que también puede desempeñarse como lateral. Pero no cabe duda de que resultaría bastante curioso ver a estos dos veteranos y experimentados jugadores, rivales hasta ahora, vistiendo la misma camiseta y compitiendo por un puesto en el once en la liga portuguesa.