Kylian Mbappé no está teniendo unas vacaciones plácidas. El delantero sabe que está ante uno de los veranos más importantes de su vida porque de su decisión dependerá en gran medida su carrera deportiva. El Real Madrid, el PSG y el Arsenal pujan por su fichaje, mientras que el Mónaco desea quedarse con sus servicios al menos una temporada más. Por eso él y su familia debaten estos días sobre cuál será la mejor elección, aunque su opinión no concuerda en todos los aspectos con la de sus padres...

Posible regreso a sus raíces

El futbolista desea y sueña con jugar en el Real Madrid. Su aspiración es triunfar algún día en el equipo merengue. Y sus padres quieren que lo acabe logrando. Pero también le aconsejan que vaya despacio y que sea prudente. Que no se precipite. El consejo que le dan es que siga la próxima temporada en Francia para tener minutos asegurados y seguir progresando, sin prisa pero sin pausa. Por eso prefieren que sigan en Mónaco o que, en el caso de cambiar de aires, recale en París.

De hecho, en los últimos días ha aparecido un nuevo factor en favor del PSG. Y no es el dinero, donde ahí probablemente gane también siempre el conjunto de la capital. Más bien es un factor sentimental, porque Mbappé y su familia son de París. Vivieron durante bastantes años en un suburbio de la ciudad y estarían encantados de volver a estar cerca de toda su familia. Consideran que este sería un entorno ideal para que el atacante siguiera con su crecimiento futbolístico y humano, y lógicamente lo prefieren a la opción de Madrid.

El PSG le alejaría del Real Madrid

Sin embargo, Mbappé no tiene todas consigo. Le está desilusionando que el Mónaco esté vendiendo estas semanas a algunos de sus mejores jugadores, por lo que ahora no vería mal cambiar el Principado por París. Pero sabe que el PSG está a años luz como club del Real Madrid y teme que su fichaje inmediato por el equipo francés le aleje de su sueño de recalar en Concha Espina. Salir del PSG es siempre mucho más difícil que hacerlo de Mónaco, por lo que si da este paso se arriesga a tomar un camino que jamás le lleve a acabar en España.

Por eso el delantero sigue dándole vueltas. La familia le presiona y le anima a recalar en el equipo de la ciudad donde nació. Además esta opción le colmaría de dinero. Pero el campeón de Europa está ahí, con los brazos abiertos. Su sueño siempre ha sido el Real Madrid y ahora mismo lo puede tocar... Así que lo único que le separa del sí al conjunto blanco es la incertidumbre de no saber si realmente sería importante en el equipo y tendría minutos, algo que en París no sería un problema.