Quedan dos semanas para que el mercado de fichajes se dé por cerrado. Zinedine Zidane ya se ha encargado de dejar abierta la puerta a alguna llegada, si bien el técnico también ha dejado claro que está totalmente conforme con la plantilla con la que cuenta. Así que la posibilidad de que no haya ningún cambio de aquí al 1 de septiembre es evidente, y entre sus firmes defensores se encuentra uno de los jugadores más destacados del Real Madrid en los últimos meses: Isco Alarcón.

El malagueño vive un momento muy dulce en el Real Madrid. Su explosión futbolística está teniendo lugar en lo que llevamos de 2017, lo que le ha permitido ser titular en partidos tan importantes como la final de la Liga de Campeones, la Supercopa de Europa o la Supercopa de España. Con él el 4-4-2 como opción táctica para el equipo blanco ha empezado a ganar peso, por lo que la antes inamovible 'BBC' ahora ha pasado a ser simplemente una opción más.

Las bajas en la delantera le están abriendo hueco

Así pues, la importancia y el peso de Isco en el equipo ha crecido considerablemente en los últimos meses. Desde que llegó al Real Madrid en 2013 Isco siempre ha tenido que dar un 'plus' para ganarse un puesto en el once, y ahora que empieza a asentarse en él le beneficia que la plantilla tenga el menor número de delanteros posibles. De ahí que el hecho de que se hayan marchado Morata y Mariano haya sido positivo en cierto sentido para él, porque supone una razón para que Zidane apueste más por el planteamiento con cuatro centrocampistas que por el de tres.

¿Y qué implicación tiene esto de cara a este mercado de fichajes? Pues muy sencillo, porque la posibilidad de que el conjunto blanco se refuerce con otro delantero supondría un nuevo problema para sus opciones de jugar más esta temporada. Sobre todo si viene un hombre como Mbappé, ya que con el francés se haría casi obligatorio mantener en todos los partidos el tridente de ataque. El nuevo fichaje rendría que rotar arriba con la 'BBC' y eso implicaría jugar en pocas ocasiones con cuatro hombres en el medio.

Los centrocampistas, con la misión de aportar mucho gol

Ahora mismo Isco solo tiene ojos para el inicio de Liga y para el inminente anuncio de su ansiada renovación, pero es evidente que tampoco le quita atención a las novedades que se están produciendo en el día a día del equipo. Y lógicamente él es el primero que prefiere que todo se quede como esté y que el Real Madrid no amplíe su nómina de atacantes. Él es el líder de la 'revolución' de los centrocampistas que está viviendo el campeón de Europa y como tal está dispuesto a demostrar a Zidane que los hombres de la medular también son capaces de aportar mucho gol al equipo.

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Su renovación, decidida desde finales de la temporada pasada (13-05)

Isco Alarcón ha decidido hablar sobre el campo cuando más en duda se ha puesto su futuro. El malagueño ha sido protagonista de multitud de noticias e informaciones en los últimos meses por terminar contrato en junio de 2018, ya que este verano está siendo clave clave para descubrir su futuro a corto y medio plazo. Sin embargo, él ha preferido aislarse y hacer lo que mejor sabe: jugar al fútbol.

De hecho, tanto el club como Zinedine Zidane consideran que ahora mismo se está viendo la mejor versión de este futbolista. En los casi cuatro años que lleva en el club el internacional español jamás jugó tan bien como en los dos últimos meses. Su última exhibición ante el Atlético de Madrid en el Vicente Calderón y en Champions así lo evidenció, aunque ni mucho menos ha sido la única. Y es que entre el madridismo todavía están muy presentes sus recientes apariciones en el Molinón o en Riazor.

Un futbolista que el Madrid sabe que no puede dejar escapar

Por ello la sensación que reina en las oficinas de Chamartín es que el jugador está terminando de mutar a 'crack'. "Antes ya era un gran jugador, pero ahora está al nivel de los mejores del mundo" se apunta desde el club. Una opinión que representa a la perfección las intenciones de la directiva con Isco, porque su renovación ha sido desde el primer momento una absoluta prioridad.

A día de hoy nadie contempla en el Real Madrid que Isco no renueve. Florentino y Zidane quieren que él otro nuevo 'fichaje' para la temporada 2017/18 y pretenden hacer un tremendo esfuerzo para retenerle. Las palabras del jugador el pasado mes de abril en las que dejaba claro que quiere seguir han traído cierta tranquilidad al club, aunque la directiva se mantiene en tensión, ya que sus últimas actuaciones están llamando la atención de media Europa y su situación hace que le estén lloviendo las ofertas.

Así, su continuidad ya no es solo una cuestión deportiva. Se trata de un aspecto estratégico, porque el malagueño acaba de cumplir 25 años y sus mejores momentos todavía están por llegar. Y el equipo más importante del mundo no se puede permitir el lujo de dejarle escapar justo en estos momentos. Por eso las negociaciones alcanzarán un punto álgido durante este verano para que Isco siga de blanco varias temporadas más. Cueste lo que cueste.