Real Madrid y Barcelona deciden este domingo quién es el ganador de LaLiga 2016/17. Se trata del título más prestigioso del fútbol español, si bien en lo económico ninguno de los dos equipos se juega demasiado, ya que la diferencia entre alzarlo o no es bastante insustancial, al menos a corto plazo. Y es que el nuevo reparto de los derechos televisivos hace que los dos clubes más poderosos del país vayan a percibir este año cantidades muy similares independientemente de su clasificación final.

El pasado verano LaLiga ya adelantó sus previsiones respecto a los ingresos por televisión que iba a tener en LaLiga que estamos a punto de cerrar. Según sus datos estos iban a rondar los 1.300 millones de euros, de forma que estos se podrán repartir una vez que finalice el curso y se obtengan ciertas variables. ¿Y cuál es el criterio para hacerlo? Pues el mismo depende de tres variables: el 50 % será un reparto equitativo entre los 20 clubes (unos 32,5 millones de euros para cada uno), el 25 % irá en función de los resultados en Primera de cada uno de los equipos participantes en los últimos 5 años y el 25 % final irá en función de aspectos como la masa social, número de espectadores, audiencias, etc.

Es decir, que el ganador de esta Liga solo influirá en el pequeñísimo porcentaje que hace referencia al 25 % del total por la clasificación de los equipos en los últimos 5 años. La organización del torneo elabora cada año una tabla histórica en la que recopila estos resultados del último lustro, y según la misma el Barcelona seguirá siendo (pase lo que pase) el primero y el Real Madrid el segundo. Esto implica que el Barcelona percibirá el 17 % de ese 25 % total (unos 55 millones de euros), mientras que el Real Madrid ganará unos 47,5 millones de euros.

En total, se estima que el conjunto catalán se embolsará este curso unos 152,5 millones; mientras que los blancos se llevarán en torno a 145 'kilos'. Aunque eso sí, si el Real Madrid levanta este año LaLiga le recortará distancia al Barcelona en esta clasificación histórica (el peso de cada temporada es 35%, 20%, 15%, 10%, 10% y 10%, yendo de más reciente a más antigua) . En el caso de los culés en los últimos cuatro años han ganado tres Ligas y han logrado un subcampeonato; mientras que los merengues han conseguido tres subcampeonatos y un tercer puesto. Unas diferencias que hacen pensar que a los madrileños les costará recuperar a corto plazo el primer puesto, si bien todo dependerá de que queden por delante de su rival en los próximos torneos.