Diecisiete años después Florentino Pérez se ha animado a desvelar algunos de los detalles que facilitaron una de las operaciones más sonadas del fútbol mundial, por lo menos hasta aquella fecha. Allá por el año 2000 el Real Madrid le arrebató de las manos al Barcelona a Luis Figo, una de sus máximas estrellas, en un acto que a día de hoy todavía sigue doliendo y mucho en Can Barça.

De hecho, por el Camp Nou siguen sin querer ver en pintura al portugués, al que odian con toda su fuerza como así quedó claro cuando visitó el feudo culé con la camiseta del Real Madrid, ya que llegaron incluso a tirarle aquella famosa cabeza de cochinillo cuando se disponía a ejecutar un saque de esquina. 

Ahora, el presidente madridista se ha encargado de desvelar alguno de los secretos que hicieron que la operación llegara a buen puerto en una entrevista que ha concedido a la cadena Fox Deportes y en la que repasa también otros aspectos importantes de su etapa como máximo mandatario del club blanco.

Le ‘arrancó’ el corazón al Barça

En esta entrevista Florentino habló claro sobre el traspaso de Luis Figo: “Cuando yo empecé nadie se creía lo de Figo. Nadie había pagado 60 millones de euros. Yo hablé con Figo y le convencí. Estaba en el Barcelona. Como decía Valdano, era como arrancarles el corazón. El caso es que yo le dije: “Queremos construir sobre ti este gran Real Madrid”. Y él aceptó", dijno Florentino.

Además, también explicó su política de hacerse con los famosos ‘galácticos’: “En el año 2000 al Real Madrid le faltaba tener grandes jugadores. Porque los grandes futbolistas son los que crean esa gran imagen que conseguimos desde aquel año con esos jugadores como Figo, Zidane, Ronaldo o Beckham. Hoy día yo quiero que ellos sigan siendo nuestros embajadores. Luego hemos intentado mantener ese nivel con Cristiano Ronaldo, Kaká, Benzema o Bale”, aseveró el presidente.

Además, explicó que no fue fácil adoptar esa política ya que se encontró con muchas voces discrepantes: “Cuando yo entré me dijeron que con este dinero se podían comprar cinco jugadores. Y yo dije: “No, no”. Por ejemplo, Zidane, que nos costó 75 millones más o menos en el año 2001, la gente me decía: “Pero tú estás loco, con esto compramos a casi un equipo entero”. Y yo dije: “No, no, pero es que yo quiero a Zizou, que es el mejor jugador del mundo”. Y así lo mismo hice con Ronaldo. Y se creó un fenómeno que pasamos de ingresar 100 millones de euros a ingresar 300 en un momento. Y dejamos de perder 30 millones de euros a ganar 50. Esa es mi mayor contribución y volví otra vez a encumbrar eso que había heredado", apuntó.

Referencias a Santiago Bernabéu

Por otra parte, también Florentino quiso quitarse parte del mérito y apuntó en esta entrevista que lo que ha hecho es seguir muchas de las directrices que marcó Santiago Bernabéu en su época como presidente del Real Madrid: “Yo heredé algo muy importante. El Real Madrid cuando yo entro en el año 2000 es el mejor club del mundo y en diciembre de ese año la FIFA nos nombra mejor club del siglo XX. Yo copié un poco lo de Bernabéu. Él dijo: “Voy a hacer el campo más grande”, porque era el año 1947 y no había más ingresos que las taquillas. Y dijo: “Si yo tengo el campo muy grande pues seré el que tendré más ingresos y podré comprar los mejores jugadores del mundo”. Entonces compró a Alfredo di Stéfano. Di Stéfano nos cambió la historia, no solo la del Real Madrid, sino la historia del fútbol. Yo hice lo mismo. Llegué allí y, en una situación económicamente muy mala dije: “Voy a traer a los mejores jugadores del mundo y nos producirán los ingresos”. Y así fue", terminó Florentino Pérez.