Leo Messi ya tiene todo listo para dar el próximo 30 de junio uno de los pasos más importantes de su vida: casarse. El argentino celebrará una espectacular ceremonia en Rosario (Argentina) para unirse oficialmente a Antonella Roccuzzo, la madre de sus dos hijos; si bien a la hora de elegir los invitados a la boda ha decidido ser extremadamente selectivo e incluso no le ha importado provocar alguna que otra ausencia que está dando que hablar en Barcelona.

Los nombres de los principales asistentes al enlace ya se han dado a conocer, por lo que se sabe que el futbolista ha querido compartir este momento tan importante con todos sus compañeros, así como con los fisioterapeutas, utileros, masajistas, etc. que trabajan diariamente con el equipo. Algo que resulta totalmente lógico, pero que a su vez delata la decisión que ha tomado respecto al resto de empleados del conjunto azulgrana.

Ausencias que dirán mucho

Y es que, según se ha filtrado en la prensa de Barcelona, Messi no ha querido invitar al presidente Josep María Bartomeu y a los miembros de la directiva, así como tampoco a Luis Enrique y el resto de técnicos que en los últimos tres años han trabajado con la primera plantilla. Detalle que evidencia que el 'crack' nunca ha tenido 'feeling' con sus superiores y que hoy en día el trato con los miembros de la Junta culé es simplemente profesional.

En el Barcelona se esfuerzan mucho en vender que son una 'familia' y 'más que un club', pero decisiones como esta delatan que su principal estrella no quiere vivir este día tan especial junto a los principales rectores del equipo azulgrana. En su caso para él no habría sido un problema invitar a Bartomeu, Luis Enrique y el resto de personas que en estos últimos años han estado junto a él y han trabajado para hacer más grande al equipo azulgrana, pero ha preferido no hacerlo y ha dejado claro cómo están las cosas hoy en día por los pasillos del Camp Nou.

Renovación ya pactada

De todas formas, tanto Messi como su padre están citados en Barcelona a la vuelta de las vacaciones para firmar su nueva renovación. El acuerdo ya está totalmente cerrado para que el argentino siga en el club hasta el menos 2022, por lo que probablemente este sea el único motivo para que el 'crack' y la directiva puedan celebrar algo conjuntamente en lo que queda de año.