El Real Madrid ha recuperado la calma tras vivir varias semanas de gran tensión por el enfado de Cristiano Ronaldo. A mediados de junio todo se paralizó en Concha Espina por la convocatoria de elecciones, si bien realmente lo que generó gran confusión en la institución fue la filtración del gran malestar de su jugador estrella. Así, todo quedó en 'stand by' a la espera de que Florentino Pérez retomara el cargo y, fundamentalmente, de que el portugués definiera su malestar y explicara su enfado.

El presidente se marcó inicialmente el objetivo de hablar con el '7' una vez que acabara la Copa Confederaciones. Sin embargo, el portugués fue liberado el pasado jueves de los compromisos de su selección y no mostró demasiada prisa por hablar con el club. Es más, su mensaje inicial fue de calma y dio a entender que la situación no era tan crítica como algunos medios de comunicación la habían intentado pintar. De ahí que aún no se haya celebrado el esperado encuentro entre el presidente y el jugador y que el mismo todavía esté pendiente de ser fijado.

Se reactiva la salida de Morata

En todo caso, en el Real Madrid están hoy mucho más seguros que hace tres semanas que Cristiano Ronaldo continuará. Por eso en el club han decidido retomar su agenda con total normalidad, lo cual implica analizar la posible salida de Morata. Como ya señalamos hace unos días la venta del jugador al Manchester United había quedado paralizada por la inseguridad que había sobre la continuidad del portugués, pero una vez que la situación ha vuelto a estar bajo control el campeón de Europa ha vuelto a escuchar las propuestas existentes.

En las oficinas del Santiago Bernabéu nadie se planteaba traspasar a Morata en el mismo verano que una supuesta salida de Cristiano Ronaldo. Por eso la tranquilidad sobre el 'crack' ha facilitado que ayer lunes tanto el padre de Morata como su agente, Juanma López, se pasaran por el estadio merengue para volver a activar la salida del delantero. El deseo de su entorno es solucionar su futuro cuanto antes para evitar que el jugador tengar que incorporarse la semana próxima a la pretemporada merengue e incluso se vea obligado a viajar a la gira por los Estados Unidos.

Arduas negociaciones

Así, durante una reunión que no llegó a la hora de duración los representates de Morata trasladaron al Real Madrid la oferta del Manchester United y pidieron formalmente que el club la escuche y le deje marchar. Sin embargo, el conjunto blanco sigue queriendo ingresar 80 millones por el traspaso, mientras que en Inglaterra a duras penas llegan a los 70. Por ello se avecinan jornadas intensas, aunque el futbolista puede tener la tranquilidad de que todo ha empezado a moverse de nuevo tras el 'bloqueo' vivido por la pequeña crisis que desató Cristiano Ronaldo.